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Éste Sermón es un poco más que la interpretación de algunos versículos de la Biblia, o de la palabra de Dios y trata sobre poner límites a Dios. No te limites
Hechos, 5, versículo 14
“Y los que creían en El Señor, aumentaban más su fe. Un gran número de hombres, así como también mujeres”
“Tanto que sacaban a los enfermos a la calle, y los ponían en camas y lechos, para que al pasar Pedro, por lo menos su sombra cayera sobre alguno de ellos“
“Y aún más, de las ciudades vecinas, muchos venían a Jerusalén, trayendo enfermos y atormentados de espíritus inmundos, y todos eran sanados”
Manipulando a Dios. No te limites
Cuando una persona aprende a poner límites a Dios, y a lo sobrenatural de su poder, lo que hace es detener lo que Dios comenzó.
La gente quiere que Dios opere de la manera que ellos quieren. Así lo limitan.
¿Por qué Dios no opera de la forma sobrenatural?
Por qué nosotros esperamos que el opere conforme a nuestra naturaleza.
A veces queremos que Dios opere conforme a nuestros pensamientos, nuestros deseos o nuestra forma de creer.
Y en realidad, con sólo la sombra basta para que sanen.
Se trata de atreverse a hacer cosas que otros no se atreven a hacer.
El Señor nuestro Dios, tiene el poder
Oh, contradicción!
Los límites son terrestres, humanos, pero carece de sentido poner límites a Dios.
El espíritu siempre sabe cómo pasar la barrera. Cómo crear cosas nuevas.
No hay límites cuando estamos conectados al Señor, nuestro Dios.
Lo natural y lo sobrenatural
Para no limitar a Dios, tenemos que aprender a caminar por la Tierra sin límites.
¿Cómo puedo transformar mi atmósfera?
¿Operar en lo sobrenatural?
Las limitaciones le pertenecen al hombre, pero lo sobrenatural le pertenece a Dios.
Para no tener límites necesitamos estar conectados con El Señor.
Cuando usted aprenda a no ponerle límites a Dios entenderá lo sobrenatural de Dios.
¿Qué es lo sobrenatural?
Es todo aquello que supera nuestro pensamiento, nuestro entendimiento, nuestras capacidades naturales.
El amor de Dios es sobrenatural porque aunque Usted le ignore, le haga daño, Él le sigue amando.
El amor de Dios no cabe en el pensamiento humano.
Éxodo Capitulo 4 verso 2
Dios le dijo a Moisés que enterrara una vara, y se convirtió en una serpiente.
No puedes llegar a tu pueblo sólo con palabras, dijo.
Necesitas evidencias de que Jehová está contigo.
Éxodo 4, 2 y 14, 12.
Pídele a Dios lo sobrenatural.
Lo sobrenatural aparta tus limitaciones.
Muchos creen en un Dios grande, poderoso, pero ellos se ponen límites.
Cada vez que un hombre llega a un límite natural, debe acudir a lo sobrenatural, a Dios.
Moisés les dijo, no tengan miedo, El Señor nos salvará.
Cada vez que atravieses una barrera que tú no conoces, es porque Dios está detrás de ti.
El pueblo debe acostumbrarse a no estar peleando con lo mismo todo el tiempo.
Aprende a usar lo sobrenatural de Dios.
Todos tenemos un don de Dios.
Levanta tu vara. Levanta tu mano.
Dios no abrió el mar en dos. Le dió a Moisés el poder de abrirlo.
Renovación de la mente
Yo nací en una familia pobre, ¿y por eso voy a ser pobre?, No, pedid y se te consederá todo…

No te limites, ni le pongas límites a Dios
Romanos 12, 2
Renovación de los pensamientos
¿Cuánta gente se vive culpando de lo que otros vivieron antes?
No adoptes lo que hizo tu padre o tu madre, sino lo que hizo Cristo.
El pensamiento se vuelve en costumbre
El problema no está en los pensamientos, sino en que se vuelven costumbres, y nuestras acciones empiezan a responder a esas costumbres, no a los pensamientos que las originaron.
Somos lo que pensamos.
Pienso, luego existo, decía René Descartes, luego Ortega y Gasset lo ampliaron, afirmando que existo porque pienso.
Al final, es lo mismo, pensar y existir. Ahora, ambas realidades son distintas: manipular, forzar, limitar.
Y ésto es singularmente absurdo, inútil y contradictorio, cuando se trata de poner límites a Dios.
Lo que hacemos, al intentarlo, es detener su poder sobrenatural, y con eso, nuestra propia evolución y recreación.
Ésta “detención” no sólo es falaz, absurda y hasta suicida, porque, como vimos en el artículo anterior, “de Dios nadie se burla“. Gálatas 7, 10 los “dardos de fuego” que Satanás te manda se combaten con la fé.
Pensamiento y acción
Éste artículo trata de la Autoayuda por el camino de Cristo.
No es una oración ni una invitación al proselitismo.
Es más una guía para ser mejores personas, más libres, al no tener límites naturales, y especialmente, sobrenaturales.
El propósito de Dios es quitarte los deseos impuros, de antes, y poner lo que él desea en ti.
La renovación de los pensamientos es lo que nos acerca a Dios.
Éste mensaje es casi más psicologista que religioso.
Es una lección reconfortante, que combina lo que dicen Deepak Chopra, Jean Piaget, y muchos otros autores de autoayuda, psicología y filosofía, con Dios.
En Dios no hay límites. No te limites
Éste es el concepto central de éste artículo.
Hay gente que se culpa o se halaga por lo que hicieron antes.
Hay gente estancada. Y cuando Dios no les da nada, entonces le culpan.
Dios no entiende lástimas. Dios entiende conexiones con Él.
Las limitaciones se levantan en la mente, no en el espíritu.
Hay gente que se acostumbra a dar lástima. Y culpa a Dios.
Hay gente con grandes talentos y grandes ideas que se mueren, no lo supieron manifestar en la Tierra.
¿Por qué?
Porque se pusieron límites y le pusieron límites a Dios. No lo dejaron actuar.
Una cosa es vivir en Dios, y otra cosa es que Dios se establezca en ti.
La forma de vivir expresa quién es Dios para nosotros.
Usted no puede vivir sin fe.
Atrévase a que Dios haga las cosas grandes.
Dios no se manifiesta en los que no le creen.
El centro de éste mensaje es que de Dios nadie se burla. Gálatas 6:7-8
¿Señor, por qué me está yendo tan re mal, en tantas cosas que yo no entiendo?, lo explicaremos
La esencia de este sermón, y de este artículo, se encuentra en éstas dos frases, que encontramos en Gálatas 6: 7-8, una Carta que fue escrita por San Pablo.
Las hemos oído muchas veces, e incluso se repiten en la Biblia en muchas secciones, con diferentes sentidos:
La primera es que de Dios nadie se burla.
La segunda es que uno cosecha lo que siembra.
De estos dos conceptos se desprenden otros muchos que vamos a analizar, sin salirnos de este contexto.
Son dos frases lapidarias, determinantes.
El párrafo completo, que da sentido a éstas dos breves líneas dice:
No se engañen: de Dios nadie se burla. Cada uno cosecha lo que siembra. El que siembra para agradar a su naturaleza pecaminosa, de esa misma naturaleza cosechará destrucción.
El que siembra para agradar al Espíritu, del Espíritu cosechará vida eterna.
Se repite esta afirmación con el Apóstol Juan 3:4.
Dios nos ayude a permanecer firme en su propósito, y a no dejarnos engañar por ningún maestro que use la enseñanza de su “librito”.
Porque Dios, el Señor, no puede ser burlado, pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará, declara Su Palabra
Y lo vuelve a escribir, Juan, cuando dice:
Todo aquel que comete pecado traspasa también la ley, pues el pecado es transgresión de la ley. …
Y continúa… Todo aquel que permanece en él, no peca; todo aquel que peca, no le ha visto ni le ha conocido.
Hijitos, nadie os engañe; el que hace justicia es justo, así como Él es justo.
Aquí agrega los conceptos de Justicia, de Ley y de pecado
Indudablemente estamos bendecidos por la Gracia de Dios y su eterna buena memoria.
Él no se olvida de nada, y no se le escapa ningún detalle.
Tal vez no actúa con la velocidad o de la manera que desearíamos, o con los tiempos que anhelamos.
Pero Dios siempre actúa y siempre llega a tiempo.
Él no se duerme,
Dios no se distrae, y su ley de la siembra y la cosecha siempre se cumple. Siempre.
Por eso la afirmación es contundente: Nadie puede burlar a Dios.
Su fidelidad y su bondad no pueden ser minimizadas.
Su grandeza y su amor no pueden ser limitados.
Dios sabe todo, mira todo, analiza todo. Y jamás se olvida.
Su ley se cumple siempre. Podemos descansar tranquilos.
Si tu siembras siempre cosechas.
La reflexión que nos queda es que Dios siempre cumple su promesa.
Dios No puede ser burlado.
Veamos ahora la segunda frase:
En la palabra divina se sentencian al mismo tiempo dos conceptos: nuestra responsabilidad por lo que sembramos, que será lo que cosecharemos, y la calidad de esa siembra, el cuido que le demos.
El primer tema parece muy obvio y por eso dedicaremos atención al segundo, que es en el que se insiste en la Palabra de Dios.
Todo lo que el hombre sembrare, eso cosechará.
Si sembramos lágrimas, eso cosecharemos.
En éste punto la Biblia hace una clara distinción:
Porque el que siembra para su carne, de la carne segará corrupción; pero el que siembra para el Espíritu, del Espíritu segará vida eterna.

Gálatas 67-8 de Dios nadie se burla
Si sembramos en lugar equivocado y no lo cuidamos, si lo hacemos por la carne, estaremos creando corrupción, y eso no sirve, ni a Dios ni a nosotros mismos.
En ésta dicotomía, entre el espíritu y la carne, está la calidad de nuestra siembra, y de nuestra recompensa, lo que cosechamos.
Por eso nuestra invitación es, siempre, sembrar para el espíritu.
Todo lo que producimos, es resultado de lo que sembramos en el Señor.
El fruto del espíritu es amor, templanza…
El amor es el primer producto, fruto de Jesús, de Dios.
Lo primero que aprende el hombre es al amor, el gozo, y el gozo es un producto del espíritu.
Esa calidad de nuestra siembra es lo que nos dará la paz.
Y la paz está ligada a la paciencia, todas éstas son virtudes que se reflejarán en nuestras acciones y nuestros resultados.
Además, la paciencia se liga a la fe y a la bondad, a la mansedumbre.
En lugar de mancillar el espíritu, hagamos que el espíritu domine.
Cuando creemos en el espíritu vencemos a la carne, porque la vanagloria es carne.
Por eso, todo lo que vemos hoy nuestros ojos lo verán mañana.
Es preciso disponer de tiempo para Dios y que la calidad de nuestra ofrenda sea impecable.
Cada vez que te preguntes:
¿Señor, por qué me está yendo tan re mal, en tantas cosas que yo no entiendo?
La respuesta la tienes dentro de ti mismo.
¿Haz sembrado para tu espíritu?…
Comienza hoy mismo a sembrar con la siguiente oración.
Por eso les invitamos a terminar éstas reflexiones con una Oración.
Todo lo que tengo es tuyo, Señor.
Que mis ojos y mis intenciones siempre estén dirigidas a cultivar mi espíritu, y no mi carne.
Que todo lo que haga, vea, diga y piense esté orientado a tu alabanza.
Tú, que todo lo ves, eres mi mejor testigo y mi principal referencia.
No pretenderé ocultarme, porque no podré.
Por eso me dispongo a aceptar que voy a sembrar lo mejor de mi, para tu gloria, por el bien de los que me rodean y para merecer tu amor infinito.
Hace poco leí una publicación de un famoso cantante Venezolano haciendo referencia a la ausencia de Dios en los corazones de la gente. Justo él se refería que cuando un alma decide hacerle el mal a otra, sin duda lo hace por esa ausencia de Dios en sus corazones.
Entonces:
Desde el punto de vista de la fé pastoral, apoyar a las familias en momentos tan cruciales como “la ausencia de Cristo en sus corazones” nos parece que es la base fundamental de nuestra Iglesia “CASA DE DIOS BETHEL“.
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